Estaba marcado en nuestro calendario de rutas 2016 que este domingo 20 de marzo teníamos nuestra sesión de fotos oficial del club para la temporada 2016.
A priori, el dia se presentaba soleado durante la mañana (lo que se torció sobremanera conforme avanzaba la tarde) por lo que todo lo teníamos dispuesto para acometer la tarea fotográfica.
Uno a uno fuimos llegando a la cita, que hoy era media hora antes de lo previsto para no entorpecer mucho el horario fijado para la ruta de hoy, que era Illora, por las Torres, Olivares, subida a Tiena y desde ahí, a la carretera de Córdoba donde tomaríamos el desvío para la citada localidad de Illora y con regreso por la vega de Valderrubio y Lachar.
Todo iba transcurriendo bien, y digo bien en el aspecto de que cada cual iba desarrollando la marcha como mejor quería, hasta la llegada a la bajada a Illora desde la carretera de Córdoba donde nuestro compañero Emilio Morales tuvo un accidente.
En el accidente, que fue ni mas ni menos que contra un tractor, nuestro compi se llevó, obviamente, la peor parte.
No es cuestión intentar esclarecer los motivos ni buscar culpables, al menos desde estas lineas, para eso están las autoridades (que por cierto se tomaron su tiempo en aparecer en el lugar del accidente).
Lo que está claro, es que nuestro compañero pasó el día en el hospital, al que trasladaron en ambulancia (con un medico maracenero incluido) con diversas fracturas y lesiones y que ahora tendrá que recuperarse poco a poco, y gracias, ya que podríamos estar lamentando consecuencias mucho peores.
Posiblemente todo se podría haber evitado con un intermitente que avise de una maniobra, con un simple vistazo al retrovisor para cerciorarse que no viene nadie antes de hacer un giro, etc. Es lo de siempre. En la carretera somos los mas débiles. Corremos unos riesgos, los que llamamos asumidos, que no se pueden evitar. Un pinchazo en una bajada, una avería en la bici, un animal (llámese perro, conejillo, etc) que se nos cruce y que pueda provocar una caída. Pero esos riesgos, los asumidos, no tienen nada que ver con los provocados. Un despiste de un conductor, o nuestro (que también los tenemos), una maniobra mal indicada, un mal adelantamiento, una prisa injustificada o mil excusas más pueden provocar un fatal accidente en el que siempre, siempre, siempre y, repito, siempre, el ciclista se llevará la peor parte.
Por suerte, ayer, la cosa no paso a mayores, pero pudo pasar.
Así que Emilio, a recuperarse pronto, que nos haces mucha falta.
Las fotos de hoy, en cuanto las tenga preparadas las publico.
Tan sólo tengo que decir que está todo dicho y bien dicho. Tienes toda la razón Enrique. Hay ocasiones en que colaborando todos, y respetando las leyes, reglas, o normas, que para algo están; se pueden evitar accidentes. Como no estuve presente, no tengo más que decir. Y creo que incluso, aunque hubiese estado, tampoco. Unicamente que apoyo totalmente lo que escribes aquí. Y deseo que Emilio se recupere pronto para que disfrute de lo que le gusta; que esté bien de salud para disfrutar de la vida en si, y que los demás disfrutemos de su compañía.
ResponderEliminarGracias por todo
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