Por tal motivo, los organizadores habían convocado a todas las peñas (las cuales muchas han faltado como siempre) y a todos los amantes de este deporte a las 11.30 en la plaza de Santa Fe para que todo el mundo pudiese disfrutar las horas previas de rodar y devorar km por donde quiera cada cual.
El Velo Club, fiel a su tradición ha acudido en masa (un total de 27) junto con algún que otro agregado, iniciando la ruta con dirección a Olivares por las Torres para llegar a Pinos Puente y desde ahí a Fuente Vaqueros,Chauchina, El Jau y Santa Fe acumulando unos 60 kms y cumpliendo con el horario previsto de llegada a la cita en torno a las 10.45 para poder disfrutar del desayuno antes de la marcha de la concentración.
Hoy, como no podía ser de otra manera, el grupo ha rodado en todo momento compacto haciendo pequeños reagrupamientos en Olivares, con una ritmo bastante cómodo para todos y concienciados que hoy, aparte de la practica deportiva, nuestra misión era concienciar a todo el mundo de la necesidad de respetar la distancia de seguridad.
Una vez llegada la hora oficial de la concentración, la cual ha sido un éxito organizativo llegando a superar con creces el millar de ciclistas venidos de toda la provincia.
Claro, la cifra no está nada mal. Era espectacular ver tal caravana rodando por la carretera custodiados en todo momento por el encomiable trabajo de la Guardia Civil de tráfico y de un sinfin de motos de voluntarios de la organización.
Digo que la cifra no está nada mal, mas de mil, pero que deberían haber sido muchos miles mas. En Granada, cada domingo se tiran a la carretera mas de 8000 ciclistas lo que deja mucho que pensar y por supuesto, preguntar, que donde estaban los otros 7000.
Aun así, hoy a nivel personal me he sentido orgulloso de ver como el gran pelotón se paraba en el lugar donde el pasado 24 de abril era atropellado un compañero ciclista, Alejo se llamaba, en la carretera que va de Santa Fe a la Malahá, y en el lugar del fatídico suceso se presentaba la familia, una familia destrozada, a colocar un simbólico ramos de flores en una cruz situada en el mismo lugar donde fue atropellado.
Esa familia, mujer, hijos, allegados, todos destrozados, llorando, apenas podían mantener la entereza de ver mas de 1000 personas guardando un emotivo minuto de silencio, minuto que solo se rompió con un cálido y conmovedor aplauso dedicado a Alejo.
La familia, mirando a la multitud, solo ha podido articular una sola palabra, GRACIAS, Lo decían una y otra vez, GRACIAS, mirando a un lado y otro. Entonces, otra vez, el pelotón clamaba con otro sonoro aplauso una frase: " No estáis solos, no estáis solos".
Una vez terminado el emotivo acto, y bajo las directrices de la organización, hemos partido con dirección a la plaza del Carmen de Granada, previo paso por las localidades de La Malahá, Alhendin y Armilla.
Una vez en Granada, lectura del manifiesto por parte de la organización, y cada grupo a su destino.
Hoy el Veloclub Maracena se ha portado como lo que es, un gran club.
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