Pues aquí estamos compañeros, amigos y simpatizantes del velo club Maracena, iniciando mes, el de septiembre, y con él, el segundo y definitivo tramo de la temporada. Una temporada que comenzó con mucha lluvia, distorsionando a todo aficionado al ciclismo y que ahora se está produciendo todo lo contrario con el calor.
Hoy estrenábamos horario de salida. A las 9.00 pero que si hubiésemos salido media hora antes no hubiese pasado nada.
La ruta nos llevaba a Nigüelas. A priori una marcha bonica por la carretera antigua de la costa y que en su día se resolvió hacer la ida pasando primeramente por el Alto de la Malahá para darle un toque de aderezo a la marcha para luego salir por el Mayerling y subir el puerto del Suspiro del Moro. Tan solo dos participantes, Rai y Damián, han completado al recorrido íntegro. El resto, debido a confusiones con la hoja de ruta de hoy unos, con lo excesos veraniegos y la falta de fondo de otros, han (hemos) tomado de la Villadiego y nos hemos saltado a la torera el paso por la Malahá tirando desde Las Gabias hacia Alhendin directamente.
La llegada a Nigüelas estaba prevista, y así ha sido, por la subida de los Lentos para después atravesar el pueblo y salir por la carretera de Motril que nos llevaría hasta el Zahor, donde hemos reagrupado el nutrido pelotón de participantes de hoy.
El regreso, mucho más cómodo, todos juntos. O casi todos, ya que algunos, haciendo gala de sabios conocedores del terreno, han dado sabida cuenta de alguna que otra higuera que había por la zona recargando las reservas de azúcar en el cuerpo, y en lo que no es el cuerpo ya que el amigo Uceda ha tenido a bien cargar una "mochililla" (que seguramente llevaba escondida Dios sabe donde) para seguir deleitando el paladar de tan dulce manjar en días venideros.
Bienvenido septiembre.
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