domingo, 3 de abril de 2022

Domingo 3 de abril: COGOLLOS VEGA - LAS TORRES

 


Hoy vamos a comenzamos la crónica hablando de generosidad, simpatía, optimismo, compañerismo y gratitud.
Todos esos calificativos podrían repartirse entre todos los que integramos el Velo Club. Aquí nadie se queda solo. Si tienes un mal día, lo suyo es pedalear, y pedalear con un grupo de amigos que visten, normalmente de amarillo.
Si lo que quieres es pasarlo bien, lo que debes hacer es pedalear, y pedalear con un grupo de amigos que normalmente visten de amarillo.
Suele resultar paradójico pero si estás en esos días grises que no irradian optimismo, lo mejor que puedes hacer es pedalear, y pedalear con un grupo de amigos que normalmente visten de amarillo.
Si al terminar la jornada de domingo piensas y lo que has hecho por la mañana, seguramente sentirás gratitud. Gratitud por la actitud de tus compañeros, gratitud por que siempre habrá un cobijo, una rueda fácil, una grupeta que tira, alguien que para ayudarte a reparar un pinchazo.... y así podríamos estar hablando largo y tendido pues en este club, lejos de parecerse a lo que habitualmente rueda y se ve por esas carreteras de Dios, es más que un club (aquí le he parecido a los del Barça), es como una familia que se va adaptando al medio, a las circunstancias.

Pero si me lo permitís, hoy quiero acaparar todos esos calificativos para dárselos al amigo Zagal y como no, a Nati, su compañera de viaje.
El amigo Zagal llegó al club a través de un mensaje vía Facebook diciendo que se quería unir a nosotros.
Fue entonces cuando un domingo apareció y no tardó en integrarse en el grupo. De eso han pasado ya unos años ¿tres? ¿cuatro? en los que hemos podido comprobar que este seguidor del atlhetic Club de Bilbao que cada día es un derroche de  generosidad, simpatía, optimismo, compañerismo y gratitud.
Y en esa última quiero pararme, en la gratitud. Cada domingo, siempre tiene esos momento para darle gracias a la vida por estar entre nosotros, por desearnos una feliz semana a todos e incluso por recordarnos (que pesao se pone) lo agradecido que está por el recibimiento que le dimos en su momento.
Al ser  de Cogollos (esto lo cuento para los que leen esto y no están en el club, que son muchos) la directiva tuvo a bien incluir Cogollos Vega en el calendario de rutas, eso sí, dando un rodeo para completar kms por la cercanía con Maracena.

El primer año, nos sorprendió Nati, su mujer, con unos suculentos bizcochos ejerciendo de anfitriona allí donde el viento se da la vuelta, junto al instituto de Cogollos, en el punto de control de firmas. Aquello nos sorprendió sobremanera al club ya que no suele ser habitual que esas cosas ocurran. 
Imagino que Nati no sabía con quien se la estaba jugando jajajajaja.
Pero que la sorpresa llegó al año siguiente cuando volvieron a aparecer los bizcochos (cada vez más buenos).

Hablando con Pepe-Patxi, que es como conocemos cariñosamente al susodicho, nos dice que cada año que vayamos a su pueblo y mientras la salud lo permita, habrá dulces viandas que calmen la ávida gula de los integrantes de este club.
Y hoy, como no podía ser de otra manera, allí hemos estado recibiendo y ofreciendo gratitud. Recibiendo su gratitud por pertenecer a este club y ofreciendo la nuestra por tan generoso gesto, no por su precio (que lo tiene) sino por su valor, valor que ha salido directamente del corazón.
Gracias infinitas Nati y Pepe-Patxi.

En lo estrictamente deportivo hoy teníamos marcada la marcha a Cogollos Vega subiendo por la carretera de Murcia hasta el Fargue y Puerto Lobo para girar por el parque natural de la Sierra de Huétor hasta Víznar, Alfacar, Nívar y Cogollos y volver por Güevejar, El Chaparral, El Cubillas, carretera de Colomera, Las Torres, cuesta del perro y una vez coronado el alto de Olivares, girar para el puerto del casillego para salir a Pinos Puente y regresar por Caparacena, el Cubillas nuevamente, Albolote y Maracena.
Dura jornada en la que el protagonista ha sido el frio matinal y el viento que soplaba fresquito y de cara en algunas partes de la subida. Bueno eso y la palabra BIZCOCHO que ha sido la más repetida por los casi 40 que hemos participado en  la ruta.

El delegado de hoy, Jonás, se ha encargado de nuestra seguridad con el vehículo de apoyo además de hacer un montón de fotos en compañía de Rafael Osuna que, verlo ya de manera asidua es una buena noticia ya que estamos viendo el final del túnel. ¡¡¡ÁNIMO RAFA!!! YA QUEDA UN POCO MENOS.



1 comentario:

  1. No me hizo falta ser del pueblo, llevar muchos años vestido de amarillo o tener algún conocido para ser recibido como uno más en la FAMILIA VeloClub.
    Debajo de cada casco, tras las gafas de sol, sobre la bicicleta, da igual del color que sea, clara, oscura de colores más llamativos etc, en el interior de cada maillot amarillo hay un corazón, una persona maravillosa que te tiende la mano, un abrazo, no te deja solo e incluso si fallas algún domingo se preocupan y preguntan “¿cómo estás compañero ? Que hoy te echamos de manos”
    Una FAMILIA con mayúsculas porque la FAMILIA está ahí, sin importar como eres, como estás físicamente o si llevas muchos kilómetros en tus piernas.
    Una FAMILIA es unión, amistad, fidelidad, simpatía, poner el hombro al que lo necesita y el oído al que ha tenido una semana menos buena.
    Hace unos días me comentaron
    “Tenía que haber más como tú en el VeloClub…”
    A lo que respondí entre risas
    “No hay más como yo, yo soy como muchos de vosotros, porque de TODOS aprendo algo a diario y TODOS apartáis en mí a diario valores y carga positiva”
    GRACIAS COMPAÑEROS SALUD Y KILÓMETROS PARA TODOS

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